lunes, 8 de diciembre de 2014

La fascinación por las máquinas versus la apatía hacia los equipos humanos


Estos días he leído este titular en referencia a la puesta en marcha de una nueva "máquina", de RMN en esta ocasión, cuyo subtítulo y entradilla dicen lo siguiente
Un nuevo equipo de resonancia magnética sitúa al Hospital de Zumarraga a la vanguardia del diagnóstico por imagen
La nueva Resonancia Magnética, cuyo coste asciende a 800.000 euros, dará servicio a 100.000 personas.

El nuevo equipo, gestionado por Osakidetza a través de la Sociedad Pública Osatek, permitirá, gracias a su gran intensidad de campo, obtener imágenes de mayor calidad y reducir las demoras.

La potencia de imagen de esta nueva Resonancia Magnética permite aumentar la capacidad diagnóstica, lo que se traduce en una mejor detección de patologías en fases más tempranas, como por ejemplo, en enfermedades neurodegenerativas, así como aumentar la precisión en el estadio precoz de los tumores.

Sería digno de estudio la fascinación que ejercen las "maquinas" tanto en los políticos como en el público en general. Un sistema sanitario es mejor o peor en función del número de los aparatitos que tiene y olvida, o margina, el valor de sus profesionales

Pido perdón pero no me he podido contener y he hackeado el subtítulo y la entradilla y me ha quedado de la siguiente manera

Un nuevo equipo de resonancia magnética Atención Primaria sitúa al Hospital de Zumarraga Centro de Salud de Sanperiquitín del Bosque a la vanguardia del diagnóstico por imagen

La nueva Resonancia Magnética, El nuevo medic@ y la nueva enfermer@ de Atención Primaria, cuyo coste asciende a 800.000 ???? euros, dará servicio a 100.000  1.500 personas.

El nuevo equipo, gestionado por Osakidetza a través de la Sociedad Pública Osatek, permitirá, gracias a su gran intensidad de campo trabajo, obtener imágenes  resultados de mayor calidad y reducir las demoras.



La potencia de imagen trabajo de estae nuevao Resonancia Magnética equipo permite aumentar la capacidad diagnóstica, lo que se traduce en una mejor detección de patologías en fases más tempranas, como por ejemplo, en todas las enfermedades prevalentes neurodegenerativas así como aumentar la precisión en el estadio precoz de muchas patologías los tumores.

Ya solo falta que el Consejero y el Lehendakari sean conscientes del matiz y acudan por los Centros a celebrar la existencia de los "nuevos (o viejos) equipos"

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