La idea es buena pero la vamos a mejorar por nuestra cuenta

Pero hay un tema del que a nadie le he oído hablar y que a partir del 1 de julio puede suponer un importante ahorro en papel. Se deberían acabar los colorines en las recetas. Ya da igual ser rojo que verde que fucsia que morado. Lo que importa es el TSI que es el que dice lo que tienes que apoquinar en la farmacia. Pero me apuesto algo a que a nadie le da por usar las recetas en blanco y negro a partir de esa fecha y seguiremos con la gama cromática que a buen seguro costarán un congo y parte del otro. Y eso también sale del bolsillo de los usuarios. ¿Si siguen con los colorines será malversación del dinero público? (20/06/2013)

Hoy, trascurrido justo un año, parece que con paso firme y decidido, aunque lento e inseguro, hemos suprimido el verde y el rojo (con lo patriótico que resultaba la gama cromática del rojo, blanco y verde) y hemos pasado al azul pantone y al blanco. Algo es algo y me queda el orgullo y la satisfacción de haberlo propuesto con un año de antelación.

Pero uno insiste y persiste y espero que dentro de un año se convierta en realidad

¿Por qué se insiste en el color? ¿Qué pasaría si solo existieran las blancas (o las azules)? (En realidad habría que decir que no son las blancas sino las negras sobre fondo blanco ya que el único color impreso en estas receta es el negro).

La respuesta es NADA. Pero nada de nada. Si es financiable, cada uno paga en función de la categoría que le ha asignado hacienda y si no es financiable, como hasta ahora, paga el 100% y la receta sale con la leyenda correspondiente. En fin, que lo hacen para no tener que aceptar las propuestas al completo. ¡Que se note quién piensa en esta casa!