Ayer se celebró el Día Mundial de la Esclerosis Múltiple y la Asociación Vizcaina de la Esclerosis Multiple, que cumple su 25 aniversario, celebró un acto social en el Hotel Carlton de la capital bilbaina. A ella invitó, y acudió, en su debut en estos saraos el nuevo Consejero, Rafael Bengoa.
Este es uno de los aspectos menos valorados del trabajo de un Consejero. Ese momento cumbre, en el que tras una larga jornada de curro, lo que te pide el cuerpo es irte a tu casa, quitarte los zapatos, darle un pase por el lomo a la pareja y sentarse un ratito haciendo lo que más apetece en ese momento: NADA.
Y en vez de eso, te endiñan, un día si y otro también, acto tras acto, en los que además de tener los pies machacados, todo el mundo espera de tí que estés al menos brillante, sino gracioso, lideres la conversación aunque no te apetezca y además seas capaz de contar alguna primicia para que los oyentes puedan al día siguiente fardar de tener una información privilegiada ( se lo oí al Consejero, casi nada).
Y para más inri, tener que oir que no paran, que como se lo pasan, que hay que ver, no dan palo al agua, todo el día de festejos.
Pero en esto, como en todo, hay profesionales y los que no pasan de poner buena voluntad. Nuestro Consejero, lo va a tener crudo porque hereda el lugar de un verdadero genio de los actos sociales: Don Gabriel.
A cada uno lo suyo. Era un crack. Conocía a todo el mundo por su nombre, abrazaba con cariño a todo pichichi, a las damas las embelesaba con su donaire, era el lider de la conversación, dominaba los temas divinos y humanos, insinuaba sin contar y encima salia de puturrú en las fotos.
Yo, por lo menos, te voy a echar mucho de menos es estas farimeriendas. Tu presencia era garantía de una velada amena.
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Este es uno de los aspectos menos valorados del trabajo de un Consejero. Ese momento cumbre, en el que tras una larga jornada de curro, lo que te pide el cuerpo es irte a tu casa, quitarte los zapatos, darle un pase por el lomo a la pareja y sentarse un ratito haciendo lo que más apetece en ese momento: NADA.
Y en vez de eso, te endiñan, un día si y otro también, acto tras acto, en los que además de tener los pies machacados, todo el mundo espera de tí que estés al menos brillante, sino gracioso, lideres la conversación aunque no te apetezca y además seas capaz de contar alguna primicia para que los oyentes puedan al día siguiente fardar de tener una información privilegiada ( se lo oí al Consejero, casi nada).
Y para más inri, tener que oir que no paran, que como se lo pasan, que hay que ver, no dan palo al agua, todo el día de festejos.
Pero en esto, como en todo, hay profesionales y los que no pasan de poner buena voluntad. Nuestro Consejero, lo va a tener crudo porque hereda el lugar de un verdadero genio de los actos sociales: Don Gabriel.
A cada uno lo suyo. Era un crack. Conocía a todo el mundo por su nombre, abrazaba con cariño a todo pichichi, a las damas las embelesaba con su donaire, era el lider de la conversación, dominaba los temas divinos y humanos, insinuaba sin contar y encima salia de puturrú en las fotos.
Yo, por lo menos, te voy a echar mucho de menos es estas farimeriendas. Tu presencia era garantía de una velada amena.
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2 comentarios:
Afarimeriendas Rocambole, afarimeriendas
Por supuesto colega. De donde crees que saco la información? Lo malo es que ya tengo el higado hecho un foie.
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