miércoles, 14 de mayo de 2014

Servimos lo mismo para un roto que para un descosido



Nuestro Centros de Salud están llenos de información como la que adjunto referente a las "Ayudas a personas para que puedan mantener su tratamiento médico" que no es otra cosa que el eufemismo que ha encontrado el Gobierno Vasco para saltarse la norma y retornar el dinero, que aportan por el copago, a aquellas personas con ingresos inferiores a 18000€ anuales.



La información es clara, sencilla y al alcance de todo el mundo.

Pues resulta que ayer la señora Roncal le achucha al Consejero porque son pocos los que han solicitado el reintegro de los gastos y no se le ocurre otra cosa que, como ya es costumbre, lo que empieza a preocupar y denota escasa imaginación y posesión muy limitada de recursos innovadores, que preguntar que a ver cuando va a dar instrucciones a los MÉDICOS para mejorar las cifras

La portavoz de Salud del grupo del PSE-EE en el Parlamento vasco, Blanca Roncal, ha informado que los potenciales beneficiarios de la compensación por copago estimados por el Departamento eran medio millón de personas, sin embargo, tan sólo 30.000 lo solicitaron en enero. Asimismo, ha exigido al consejero de Salud, Jon Darpón, que aclare cuándo va a dar la instrucción para que médicos, centros de salud y oficinas de farmacia informen a los pacientes del derecho a que se les compensen las cantidades abonadas por copago si tienen ingresos inferiores a 18.000 euros.

No nos podemos quejar. Servimos lo mismo para un roto que para un descosido. Pues a mi se me ocurre que en cada centro de salud se aposte un apuesto militante socialista, jubilado o parado, para explicar a todos los usuarios el contenido del documento, les ayude a cumplimentar la solicitud y la entregue en su nombre donde corresponda. Espero ver a la señora Roncal, que aunque no está parada ni es jubilada es parlamentaria, predicando con el ejemplo y nos libere a los socorridos "chicos para todo" de esta nueva encomienda que ya tenemos bastante contenido de trabajo (por si no se había enterado). Lo que no es óbice para responder encantados, y entregar con una sonrisa el folleto adjunto que tengo en la consulta, siempre que alguien me solicite la información.

Pero de eso a que me den instrucciones hay un abismo abismal.

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