jueves, 26 de noviembre de 2015

Chanson D´Amour: OSI, je t´adore (IX/X)


Como bien sabéis los que domináis los temas de gestión y probablemente todos en general, el Cuestionario D´Amour es una herramienta que pretende recoger la percepción de los profesionales, de una OSI en nuestro caso, acerca de la colaboración entre los distintos servicios, niveles asistenciales o distintas organizaciones que se suponen deben trabajar conjunta y coordinadamente.

Recoge 10 items que a su vez se evalúan del 1 al 5. Es bueno (y necesario) conocer los criterios que son claves para que, cualquier organización que precisa de la colaboración de distintos servicios o niveles asistenciales para poder trabajar, alcance unos niveles de excelencia o para constatar en su caso negativo que es un desastre de organización.

Así que vamos a ir conociendo, por entregas como las buenas teleseries, estas maravillosas estrofas que componen nuestra Chanson D´Amour


9.- Protocolización: La protocolización permite clarificar las responsabilidades de cada profesional y negociar el reparto de dichas responsabilidades. Existen muchos mecanismos para formalizar los acuerdos y pactos entre los profesionales de uno y otro nivel: protocolos, rutas asistenciales, sistemas de información, acuerdos interorganizaciones o entre unidades etc. 

Ahí va una de perogrullo. La protocolización permite pero no garantiza. La existencia de protocolos, rutas asistenciales, sistemas de información, acuerdos interorganizaciones o entre unidades no es garante, en absoluto, de que las responsabilidades de todos los actores sean acorde a sus responsabilidades, que se mida a todos con criterios semejantes, que se dote a cada cual del rol que le corresponde ni incluso que sea eficaz ni eficiente. Aunque cierto es que su existencia permite, si se hacen con cabeza, alcanzar los objetivos que enumera el item del cuestionario.

¿Qué pasa cuando una ruta asistencial plantea como indicadores de su buen funcionamiento, en exclusiva, lo bien o mal que lo hace uno de los niveles asistenciales y deja sin medir la actuación del otro nivel asistencial? Pues eso, que no pasa NADA

Es lo que se llama protocolos sobre criterios de correcta derivación. Tú, chavalín, para mandarme un paciente de XX me lo tienes que mandar con A B C D y C y te voy a medir a ver que tal lo haces. Luego, lo que yo haga con los pacientes es cosa mía y a ti no te interesa, of course. ¡Hasta ahí podríamos llegar!

Es lo que se llama la RESPONSABILIDAD ASIMÉTRICA

Un ejemplo:

Estos son los indicadores de la Ruta asistencial de la Demencia de mi OSI Bilbao Basurto


Como se puede apreciar solo miden a la parte contratante de la primera parte. Miden si los pacientes que derivamos cumplen con los criterios de "buena derivación". Y nada más. Solo sirven para comparar a un equipo (parte contratante de la primera parte)  con otro (también parte contratante de la primera parte). Nada se mide de las partes contratantes de las segundas partes.

Por poner un ejemplo ¿No sería interesante medir si los cuidadores de los pacientes que transitan por esta ruta asistencial claudican mas o menos, o antes o después que otros cuidadores de pacientes ajenos a esta ruta, como consecuencia de una detección precoz, una derivación correcta y un tratamiento, y seguimiento, en fases tempranas? Así, hasta mil indicadores


1 comentario:

Cristina Quesada dijo...

Se podria medir la medicacion pautada e incluida en presbide por neurologia, la prescripcion de genericos, la demora para citar las primeras consultas... ¿Las rutas/protocolos/etc se crean entre todos los "afectados"? ¿O el q parte y reparte ya se sabe?