jueves, 27 de noviembre de 2014

El renacer de los generalistas (los todólogos)


Me encanta cuando la gente hace trampa en el solitario. Resulta que lo que está últimamente de moda es reivindicar la formación generalista de los profesionales que trabajan en los hospitales. De hecho, la tan discutida troncalidad quiere incidir en esa visión de la formación con una base más amplia que el "pedacito del cuerpo" en el que te ha tocado formarte.

Nada que objetar en principio hasta que uno ve como el personal va arrimando el ascua a su sardina y observo las reflexiones de los compañeros internistas que ni cortos ni perezosos y aprovechando que el profesor Rawlins hace hincapié en que necesariamente habrá que cambiar la forma de atender a los pacientes, que cada vez más llegan a los hospitales aquejados de múltiples dolencias y defiende que tienen que ser las especialistas más generalistas, como los internistas y los geriatras, los que asuman la coordinación de la asistencia al paciente.

Y esto les da pie a los internistas para decir

«El 65% de las personas que ingresan en un hospital lo hacen afectados por varias patologías y lo lógico es que los atienda alguien que sabe tratar varias patologías del paciente a la vez», argumentó Pilar Román, presidenta de la SEMI, que está convencida de que vamos a un sistema en el que el paciente es el centro de la asistencia, y al rededor de ese centro se organizan todos los médicos y profesionales que tienen que atenderlo, coordinados por un médico internista. Aseguran desde la SEMI que este modelo ahorraría muchos costes y permitiría hacer una gestión mejor de los recursos.

El rechazo a un mayor protagonismo de la atención por generalistas viene motivado porque «existen muchas capillitas y parcelas sanitarias» y se carece de coordinación.

Como podéis leer, ahora resulta que los verdaderos conocedores y expertos en la todología no somos los médicos de familia que trabajamos en Atención Primaria, sino los internistas y los geriatras. Nosotros nos debemos dedicar al cultivo de las flores y a la lectura de la poesía.

Porque ya se sabe que en la urgencia deben estar solo los urgenciólogos y coordinando a los ingresados los generalistas hospitalarios, los internistas (y si es muy mayor, los geriatras y si es muy pequeño los pediatras). Nosotros siempre fuera de esos ámbitos por mucha integración que queramos vender y explicar, no vaya a ser que alguien comprenda que la visión de un médico de atención primaria es la más parecida a la del todólogo y alguna mente mal intencionada empiece a valorarla y comience a asignar nuevas funciones o nuevos roles a estos "otros" generalistas.

Pero ya se sabe que «existen muchas capillitas y parcelas sanitarias» y mejor lo dejamos como está.


2 comentarios:

Kike Cimas dijo...

Rafa, me encanta esta entrada tuya. A lo mejor recuerdas algo de mi exposición en el congreso semFYC de Zaragoza en 2011 sobre crónicos: entonces yo señalaba precisamente ésto. Otros quieren ser todólogos mientras nos convierten a los médicos de familia (o nos convertimos solos) en nadólogos... y todavía nos hablan de chiringuitos...

Lis Ensalander dijo...

Lo recuerdo Kike Tus dotes de pitoniso han quedado patentes